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Ni fresa ni chocolate

23 y L. Es la esquina más céntrica de La Habana. Siempre hay movida. A cualquier hora. Juntos, como dándose la mano, tenemos al hotel Habana Libre, la heladería Coppelia y el cine Yara. La cartelera de neón del cinematógrafo tiene demasiadas bombillas fundidas y anuncia un filme británico, El doctor imaginario, de escasa repercusión.

La cafetería del antiguo hotel 5 estrellas de la cadena Hilton, hoy Habana Libre, repleto de luces y mármoles, es punto de cita de chicas a la caza de un novio extranjero y chicos bisexuales que andan en la misma faena. También de gente con cierto poder adquisitivo, para beber cerveza nacional o extranjera, y ver el fútbol en amplias pantallas de plasma del bar. Las peñas que apoyan a España, Brasil, Argentina, Alemania, Italia, Holanda o Francia se la pasan pipa en el corazón del Vedado.

Allí, en La Rampa, una avenida de cuatro vías con aceras de granito diseñadas por famosos artistas plásticos del patio, que comienza y muere en el malecón, están concentrados los mejores locales de copas de la ciudad. En La Arcada, justo a la entrada del edificio donde radica la televisión cubana, se concentraron fans para ver el partido donde Alemania humilló a Australia 4 goles por cero.

La bulla es grande. Aunque más soportable que las ‘vuvuzelas’ en los estadios sudafricanos. La administración del cine Yara anuncia que colocará pantallas gigantes exteriores, para que los transeúntes puedan ver la semifinal y final de la Copa. Y eso que Cuba no está en el Mundial.

Niños y adultos hacen filas de dos horas para entrar a Coppelia. Los helados ya no tienen la calidad de antaño. No hay fresa ni chocolate en pesos cubanos. Sólo por moneda dura. Frente a la heladería, un establecimiento vende pan con perro caliente las 24 horas, a 10 pesos (0. 50 centavo de dólar), con bastante demanda.

Mientras muchos ven correr la Adidas Jabulani, pocos se han percatado de que el gobierno de los hermanos Castro está moviendo fichas de forma discreta. Con su mejor moneda de cambio y de negociación, los presos políticos. Como siempre ha ocurrido.

Ya el opositor Ariel Sigler Amaya salió de la cárcel. En ambulancia, muy enfermo. Hasta la fecha, a doce los han trasladado a prisiones más cercanas a sus hogares. En coches con rejas, escoltados, han llegado a sus nuevas celdas.

Dijo el canciller Moratinos en Luxemburgo que en los próximos días, en Cuba se producirán excarcelaciones. Es probable. Puede que no. La lista de los Castro es como una lotería. Depende de cuestiones internas. De la situación internacional o del estado de ánimo de los mandamases.

Para los cubanos que andan por La Rampa, los presos políticos es un asunto lejano y las excarcelaciones no son noticia.

El gobierno está ocultando sus movimientos de fichas de manera magistral ante la población. No quiere alarmar. Prefiere que la gente se mantenga entretenida con el fútbol y haciendo colas de dos horas para un tomarse un helado. Aunque no haya ni fresa ni chocolate.

Iván García

Foto: veo_veo, Flickr

Sobre admin

Periodista oficial primero (1974-94) e independiente a partir de 1995. Desde noviembre de 2003 vive en Lucerna, Suiza. Todos los días, a primera hora, lee la prensa online. No se pierde los telediarios ni las grandes coberturas informativas por TVE, CNN International y BBC World. Se mantiene al tanto de la actualidad suiza a través de Swissinfo, el canal SF-1 y la Radio Svizzera, que trasmite en italiano las 24 horas. Le gusta escuchar música cubana, brasileña y americana. Lo último leído han sido los dos libros de Barack Obama. Email: taniaquintero3@hotmail.com

2 comentarios

  1. Ni fresa ni chocolate,ni verguenza,ni libertad; todo se ha ido a pique….

  2. Cesar Rodriguez

    Así es y siempre ha sido así. El pueblo de Cuba no tiene idea de que por ejemplo Orlando Zapata es el muerto número 11 en huelga de hambre en lo que va de comunismo en Cuba. Gracias Laritza, sigue con tus comentarios. Los tuyos y los de los demás blogueros. Son como una lima.

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