Ana Luisa Millares, holguinera de 43 años, lleva menos de ocho viviendo en un barrio de La Habana. Nadie se explica cómo, en tan poco tiempo, le pusieron una línea de teléfono y le asignaron una ‘misión’ (trabajo de cooperación) en Venezuela. Regresó cargada de equipos electrodomésticos y dinero suficiente para, en menos de doce meses, construir su casa.
Sus vecinos están molestos con el aumento del nivel de vida de la señora Millares. Muchos no han logrado en su vida la mitad de lo que esta mujer consiguió. En tono de desprecio y a sus espaldas, le dicen “la palestina”, como los habaneros llaman a los nacidos en las provincias orientales.
La migración, principalmente del campo hacia la capital está determinada, en primer lugar, por la diferencia en el desarrollo económico y social de las provincias del país. Por otra parte, el gobierno suple con los orientales, la fuerza de trabajo en los oficios que los habaneros rechazan.
Del tema se habla poco o nada. Hasta hoy, ningún análisis sociológico explica el por qué del recelo de los habaneros respecto a los orientales. Incluso normas legales impuestas por el gobierno para frenar la migración hacia la capital, como el Decreto 217 del Comité Ejecutivo del Consejo de Ministros, refuerzan ese sentimiento de repudio.
Algunos justifican este rechazo con hechos históricos. Según alegan, cuando los guerrilleros, en su mayoría orientales, llegaron a La Habana en enero de 1959, destruyeron la capital. Convertidos en grupo dominantes se hicieron de los mejores inmuebles de la ciudad, para ellos y sus familiares. Desde entonces, como la agrupación musical los Van Van canta, “La Habana no aguanta más”.
Entre los habaneros existen otras hipótesis. Hay quienes opinan que es un problema de idiosincrasia y aseguran que los orientales suelen son incondicionales al gobierno y, a su vez, los más hipócritas. También se argumenta que los principales dirigentes del gobierno se nominan y eligen por los territorios orientales de donde proceden.
Otros mencionan una realidad: los orientales integran mayoritariamente la policía, la principal fuerza de represión de la ciudadanía en la capital. Un oficio rechazado por los capitalinos, incluso desde antes de que triunfara la revolución en enero de 1959.
El hecho fue reconocido por Raúl Castro en la clausura de la primera sesión parlamentaria del año 2008, cuando afirmó que “si no vienen los orientales a cuidar a los habaneros, empiezan a incrementarse los robos”. Frase que tiene más de una interpretación.
En realidad es el propio gobierno quien fomenta la migración desde otras regiones hacia la capital. El propio Raúl Castro preguntó: “¿Quién va a construir en La Habana si no vienen de casi todo el país, y muy especialmente de Oriente, los constructores? Hasta maestros hay que traer de las provincias del interior y sobre todo de Oriente. Y la capital creo que es la que mas habitantes tiene”.
Esta situación ha determinado que en La Habana los ciudadanos oriundos del oriente del país sean más vulnerables desde el punto de vista social. Y algunas actitudes, incluso, pueden calificarse de xenófobas. Un asunto donde el gobierno tiene la mayor responsabilidad. Por una parte, frena la migración vulnerando los derechos fundamentales de estas personas. Y por otra, la estimula, según su conveniencia.
Laritza Diversent
Foto: ranitadejere. El tren es el medio más utilizado por los orientales para trasladarse a La Habana. También el utilizado por la policía para deportarlos a sus provincias de origen.
Soy mexicano. Del edo de Sinaloa y en mi pais como en otras capitales de latinoamerica estas cds estan formadas por gentes llegadas de las provincias yo tengo unos amigos habaneros muy orgullosos de serlo su familia abuelos y tios mayores llegaron a la Habana a finales de los 40 del siglo pasado su actitud me recuerda a lis capitalinos en Mexico la familia de ellos llego de Santiago por cierto muy habaneros y todo pero su raiz familiar es guajira como ellos dicen al no habanero antes de hablar que revicen la historia familiar y no traten mal al que va llegando. Y no olviden que decadas atras tambien sus familias fueron imigrates lo mismo se vive en U.S,A con los 2 o 3 generacin nacidos aca se creen la ultima coca coa del desierto
hola Laritza , soy santiaguero y vivo en New York hace anos, he viajado muchisimo por mi trabajo desde japon , australia, argentina, south africa , india y muchisimos lugares mas y debo de decirte que la migracion hacia las capitales es algo normal ………………… no tengo nada contralos habaneros pero quienes son los que llenan la plaza de la revolucion cuando el geriatra habla , quienes participan en los actos de repudio contra las damas de blanco? , no creo que todos son orientales ……………… recuerdo que en mi ultimo viaje a la habana vi algo que solo lo compare con la India , un basurero en el medio de centro habana………………. sin ofensas pero discriminar a otro cubano es un insulto a la cubania
estoy completamente de acuerdo contigo mo amiga es real todo lo expuesto porque yo soy de matanzas en las afueras y metiendo cabeza estoy en la farandula del gobierno y bien parada , ja,ja,aja pobre pueblo como me rio de el