Desde La Habana

Mi primo Yuri

Mi primo Yuri

El 26 de agosto de 1961, exactamente un mes después de que Fidel Castro condecorara a Yuri Gagarin con la Orden Playa en un acto en la Plaza de la Revolución, en un hospital habanero nacía Lázaro Yuri Valle Roca, el primer hijo de mi prima Lydia Roca y de su marido Rafael Jesús Valle, a su vez, el primer nieto del entonces secretario general del Partido Socialista Popular (PSP), Blas Roca Calderío y de su esposa Dulce Antúnez Aragón, con un amplio historial como militante del PSP.

Como a todos los abuelos, a Dulce y Blas se les caía la baba con aquel rubianco de ojos claros y que un ‘experto en temas raciales’, hubiera clasificado como ‘capirro’ o ‘blanconazo’ de tercera generación. Algo que no importaba en una familia mestiza que por línea materna tenía raíces en Manzanillo y Sancti Spiritus. Yuri no solo le robó el corazón a sus padres y abuelos, también al del resto de su familia y a todo el que lo conocía, incluidos los choferes y escoltas que posteriomente tendría Blas.

Espabilado, inquieto, alegre, simpático, cariñoso, cuando de pequeño veía a su abuelo tomar café, le tenía que dar un ‘buchito’, o si encendía el tabaco, tenía que darle una ‘chupadita’. Pero si debía estar tranquilo, lo estaba, como en la foto del casamiento de un familiar, en 1965, muy seriecito, observando al gordo Quintero, mi padre, firmando como testigo de la boda, mientras un niño a su lado se saca los mocos. O en un avión, sentado en las piernas de su abuelo, siguiendo con atención por la ventanilla lo que ha provocado que su abuelo hiciera una exclamación.

En 2017, en un texto dedicado a los treinta años de la muerte de su abuelo Blas Roca, Yuri recordaba:

«En 1980, en pleno éxodo del Mariel, yo pasaba el servicio militar obligatorio en Tropas Guardafronteras y la Griffin, la lancha interceptora en la que iba como electro navegante, tuvo que varar para hacer reparaciones en Casablanca, en el puerto de La Habana. Allí vi como un hombre que presuntamente quería abandonar el país, fue casi asesinado por una multitud de personas. Quedé muy impresionado y frustrado por no poder hacer nada por ese hombre. Traté de que no le dieran más y casi me matan a mí también. Cuando llegué a mi casa estaba mi abuelo. Le conté lo sucedido y me dijo: Usted hizo bien, no se puede permitir que esas cosas sucedan, esos son métodos fascistas. No me dijo nada más. Mis abuelos, que fueron quienes me criaron, siempre me decían que yo sería lo que fuera capaz de lograr, pero sin maltratar, sin hacer malas acciones ni guataquearle a nadie. Que mis criterios e ideales, los que fueran, los defendiera con firmeza. Nunca me dijeron que tenía que ser comunista porque ellos lo eran, me inculcaron la libertad de pensamiento, recalcándome que ése era un derecho que tenemos todos los seres humanos al nacer».

En 1991, mi primo Vladimiro Roca Antúnez, uno de los cuatro hijos del matrimonio Roca-Antúnez y tío de Yuri, se declaró disidente. Su madre Dulce, fallecida en 1995, no le dio la espalda, aceptó que discrepara de la revolución y tuviera sus propias opiniones. Unos diez años después, Yuri comenzaría a escribir, hacer fotos y videos como bloguero y periodista independiente. En el blog Desde La Habana se puede leer el post de Yuri titulado La odisea de Yaneth. En 2011, al periodista independiente Iván García le preguntaron sobre su parentesco por vía materna con Blas Roca y respondió: «De ese parentesco me quedo con las entradas para los palcos en el Latino que Blas siempre nos enviaba (mi abuela y yo érmos fanáticos de la pelota) y lo chévere que es Yuri Valle Roca, el nieto mayor de Blas».

Cuando su madre Lydia murió, en 2013, Yuri ya era un opositor reconocido, pero desde el principio hostigado y sufrido detenciones y agresiones de la policía política. El 16 de mayo de 20l2, Luis Cino denunciaba en CubaNet: «El bloguero y periodista independiente Yuri Valle Roca fue golpeado en plena vía públicado por efectivos de la Seguridad del Estado antes de ser detenido en la tarde del sábado 12 de mayo, cuando intentaba reportar una actividad en el parque de Carlos III, en Centro Habana. Poco después de llegar al parque, Valle Roca fue rodeado por alrededor de una decena agentes de la policía política. Cuando se negó a entregarles la cámara fotográfica y el celular, lo tiraron al piso y lo golpearon ante decenas de transeúntes y personas que esperaban el ómnibus en una parada cercana».

Si sus abuelos Dulce y Blas hubieran vivido lo suficiente y hubieran llegado a ver que además de su hijo Vladimiro, su nieto Yuri igualmente decidió oponerse al régimen castrista, aunque no les hubiera gustado, lo hubieran entendido. Porque si algo bueno tuvieron los comunistas del PSP es que la mayor parte de su existencia, vivieron y lucharon en una sociedad que tendría muchos defectos e injusticias, pero donde había pluripartidismo, libertad de prensa y asociación y democracia, salvo en determinadas etapas.

En su programa del lunes 21 de junio que se trasmite por Facebook y You Tube, Juan Juan Almeida García, hijo del comandante Juan Almeida Bosque y quien desde 2010 reside en Miami y niño conoció a Yuri y a los Valle-Roca-Antúnez, aifrmó que detrás del ensañamiento contra Lázaro Yuri Valle Roca estaba Alejandro Castro Espín.
Al ver la foto de Raúl Castro con Yuri cargado, en 1964 o 1965, me cuesta creer que el hijo menor de Raúl y Vilma Espín, según Juan Juan, odiara a Yuri, inclusive antes de éste ser opositor. Si la situación fuera a la inversa y en el poder estuviera Blas Roca y el disidente fuera un hijo o nieto de Raúl Castro, segura estoy que Blas, con quien trabajé como mecanógrafa desde agosto de 1959 a marzo de 1961 y conocí bastante su forma de ser y pensar, no lo reprimiera como están reprimiendo a su nieto Yuri, desde el 15 de junio encerrado e incomunicado en un calabozo de Villa Marista y que según su esposa Eralidis Frómeta estaría siendo torturado.

Por pensar diferente, expresar los criterios y querer una patria mejor, una nación firmante de la Declaración Universal de Derechos Humanos el 10 de diciembre de 1948 en París, no puede, no debe, acosar, detener, ordenar arrestos domiciliarios y menos encarcelar y enjuiciar a nadie por disentir o manifestarse pacíficamente. Ni a mi primo Yuri, ni a ninguno de los cubanos y cubanas que en estos momentos permanecen injusta y arbitrariamente en celdas de toda la isla.

Tania Quintero

Foto: Raúl Castro cargando a Yuri, en 1964 o 65. A la derecha, Armando Acosta,viejo militante del PSP.

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