Desde el viernes 7 de octubre, la líder de las Damas de Blanco, Laura Pollán, se encuentra ingresada en la sala de terapia intensiva del hospital Calixto García, situado en el Vedado, La Habana. Según un parte médico ofrecido el sábado, «su situación es muy grave, pero estable», dijo su hija, Laura María Labrada.
Pollán está recibiendo medicamentos antivirales y antibacterianos, y permanece sedada. El viernes, su familia había reportado que la opositora presentaba falta de aire, taquicardia, y el azúcar y la presión las tenía descompensadas, lo que obligó a su inmediato ingreso hospitalario.
En Cubanet, el periodista independiente José Hugo Fernández, daba a conocer unas declaraciones de Héctor Maseda, el esposo de Laura: “No ha mejorado, pero tampoco ha empeorado”. El ex preso político dijo que le tomaron muestras para análisis y las llevaron al IPK (Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí), buscando definir qué tipo de virus le ocasiona la crisis.
La disidente, de 65 años tiene antecedentes diabéticos y en las últimas semanas sufrió un intenso estrés por los contínuos actos de repudio de fuerzas militares y paramilitares contra las Damas de Blanco. El más reciente, el pasado 24 de septiembre, a las puertas de su vivienda en Centro Habana, donde ella y las mujeres que le acompañaban, fueron insultadas y golpeadas por turbas del régimen. Ese día pretendían asistir a una misa en la Iglesia de la Merced, en la Habana Vieja.
Tania Quintero, con informaciones de Diario de Cuba y Cubanet.
Foto: Ansa, marzo de 2010.Rodeada de paramilitares, Laura Pollán y varias Damas de Blanco se dirigían a soltar palomas en el malecón. Lleva el brazo enyesado porque días antes habían sido fuertemente agredidas por agentes uniformados, en la barriada habanera de Párraga.
Fernández, que reporta desde Cubanet el estado de salud de Laura Pollán. En 1989, ese señor, entonces secretario del sindicato en la emisora radial Radio Ciudad de La Habana, sancionó el castigo impuesto por la dirección de la planta de sacarme de mi programa «Despertar Habanero por un mes, con rebaja de salario incluída, por supuestamente haberme reído de Fidel Castro, algo completamente falso. El señor Fernández no se encontraba siquiera en el edificio de la emisora en el momento de los hechos. Aún asi, no vaciló en plegarse indignamente ante la dirección de Radio Ciudad, integrada por individuos extremistas y temibles dirigido por a señora Edelsa Palacios. Prohibido olvidar!!!!! MARIA LUISA MORALES