Desde La Habana

El modelo del momento es cubano-catalán

Nació en La Habana en 1991 y hace tiempo vive en Barcelona, donde fue descubierto. De piel y cabellos morenos, lleva barba y no se afeita las axilas, a pesar de ser ‘metrosexual’, como le llaman a los hombres que se preocupan por su cuerpo y su imagen.

Es el último descubrimiento de Tom Ford (Texas, 1961), uno de los más famosos e influyentes diseñadores de moda de Estados Unidos. Abiertamente homosexual, está casado con el periodista Richard Buckley, ex editor en jefe de la revista Vogue. En 2009, Ford debutó como director de cine (A Single Man, con Colin Firth y Julianne Moore) y es un apasionado de la arquitectura moderna.

Betancourt e Irina Shayk -la novia de Cristiano Ronaldo- forman una de las parejas profesionales de modelos más cotizadas. El apellido completo de ella es Shayjlislamova y el color tostado de su piel, similar al de una latina, lo heredó de su padre, un minero tártaro. De su madre rusa, sus ojos claros. Desde que en 2004 en su ciudad natal fue elegida Miss Cheliabinsk, su carrera ha sido meteórica.

A diferencia de Irina, Betancourt lleva solo un año modelando. En El nuevo chico Ford, entrevista que antes de mudarse a Nueva York le hiciera la edición española de la revista Grazia, el cubano-catalán contó que todo fue un poco inesperado. Entre otras visitó Elite Barcelona, la agencia que lo representa. «Nunca pensé que pudiera dedicarme a esto. Muy pocos chicos desean ser modelos cuando se hacen mayores».

Elite Barcelona abrió su oficina en 1992 y se ha convertido en una agencia líder en España, acorde a la filosofía de la firma Elite, creada en 1982 por John Casablancas, recientemente fallecido en Río de Janeiro. Sus padres fueron inmigrantes catalanes en Manhattan. Antes de fundar Elite Model Agency, la escuela de modelos más grande del mundo, Casablancas vivió en México, Suiza y Brasil. De su matrimonio con la modelo danesa Jeannette Christiansen nació su primer hijo, Julian Fernando Casablancas, hoy de 35 años y vocalista de The Strokes, banda de ‘garage rock’.

Betancourt es muy activo en las redes sociales. «Me gusta responder a las personas directamente, aunque a veces no tengo tiempo o termino el día agotado de trabajar». Su Twitter: @jclbetancourt

A los periodistas del mundo de la moda y el corazón, el hecho de que él hubiera nacido en La Habana de 1991 no les dice nada. Pero a mí sí: Juan nació en pleno ‘período especial en tiempos de paz’, bautizado así por Fidel Castro, una etapa que para algunos aún no ha terminado. La más dura vivida por los cubanos en los últimos 54 años. Que ya es mucho decir.

Si continúa triunfando, en los próximos años Juan Betancourt seguirá compartiendo con gente de diversas nacionalidades, culturas y estratos sociales. Escuchará hablar en muchos idiomas. Lo normal en un planeta globalizado, quizá no tanto para alguien nacido bajo «la maldita circunstancia del agua por todas partes», según dijera el poeta y dramaturgo Virgilio Piñera (Matanzas 1912-La Habana 1979).

Definiciones poéticas aparte, tal vez antes de viajar a España con su familia, cuando Betancourt un día se sentó en el muro del Malecón y se quedó mirando las aguas del Oceáno Atlántico que bañan las costas habaneras, no podía imaginar que otras aguas, las del Meditárraneo, le iban a traer buena suerte.

Tania Quintero

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