Un periodista independiente encarcelado por más de cien días, afectado por una grave enfermedad que pone a toda hora en peligro su existencia, bajo los rigores cotidianos y violentos de una prisión de alto riesgo, es un escándalo y un crimen sin nombre, una agresión sin fronteras en el escenario de cualquier sociedad democrática del mundo.
En Cuba no. En esa isla es parte de la realidad y mucho más. Si se trata de un profesional que lo que hace es reportar con honestidad y profesionalismo el curso de la vida en su país es visto como una fuerza enemiga por los que tienen el poder y lo ejercen como si la nación fuera una propiedad privada. Estas personas olvidadas tienen nombres y apellidos.
Hablo de Lázaro Yuri Valle Roca, un reportero que está encerrado en el Combinado del Este, prisión en las afueras de la capital, con una profunda afección en los riñones, sin atención médica y sin contacto directo con su familia a lo largo de más de tres meses.
En una dura denuncia, su esposa, Eralidis Frómeta, asegura que los ciudadanos cubanos desaparecen en perfecto estado de salud y los liberan cuando están a punto de morir o cuando no tienen cura. Añade que a ella le escondieron que su marido estuvo grave de muerte en la prisión “¿Y ahora qué? ¿Lo devolverán cuando esté ya para hemodiálisis o dentro de una cajita de madera? Lo quiero vivo. La vida de Yuri peligra.”
Valle Roca está acusado de desacato y propaganda enemiga porque en el pasado mes de junio, como periodista independientecubrió el lanzamiento de octavillas desde lo alto de un edificio en una céntrica calle habanera. Las octavillas tenían frases de José Martí y Antonio Maceo.
El reflejo de lo que sucede en la república no es patrimonio exclusivo de familiares y amigos. Me gustaría dejarle a los lectores las palabras del reconocido cineasta Carlos Lechuga, quien actualmente realiza una película titulada Vicenta B:
“En estos momentos, en la isla, tengo varios amigos que llevan más de 80 días presos solo por el hecho de pensar diferente. Le dedico esta película a todas las madres y abuelas cubanas, que desde el año 1994 están tratando de poner un plato de comida en la mesa y ahora tienen que sumar la preocupación de tratar de que sus hijos no estén presos.”
Es el retrato real de la Cuba de hoy.
Raúl Rivero
Blog de la FNCA
Foto: Una de las tantas ocasiones en que Lázaro Yuri Valle Roca fue violentamente arrestado en La Habana. Tomada de Radio Televisión Martí.