Home / Las Crónicas de Raúl / Apuntes de verano

Apuntes de verano

Entran y salen las estaciones y, en América Latina, la realidad es una estampa de violencia, corrupción y demagogia que no hay ni tiempo ni fuerza humana que la pueda despegar de la vida. Es un culebrón escrito por unos guionistas decididos a que los malos no pierdan el poder.

Lo peor de todo, lo más peligroso, es que esa telenovela tiene millones de espectadores cautivos y silenciosos. Este verano empieza con las elecciones de Colombia como único acontecimiento novedoso y esperanzador, aunque rodeado de controversias y herido por la guerra. Al lado, está Hugo Chávez dedicado a desarticular a Venezuela, paso a paso, y frente a una cámara de televisión.

Un poco más allá, la policía antimotines del presidente Evo Morales reprime a trancazos y con agentes químicos, en la plaza de Sucre, a políticos de la oposición y estudiantes universitarios. En México, sólo el viernes, se reportaron 58 muertos en la guerra contra el narcotráfico en una serie de episodios sangrientos que incluyeron el asesinato de cinco jóvenes y el de un alcalde en la Ciudad de Juárez.

Es un panorama que tiene diversos registros y colores en el continente. Se salvan muy pocos y, quienes se salvan, se quedan paralizados por el miedo. O por el oportunismo.

Los que sustentan ese escenario tratan de que los observadores se acostumbren. Trabajan para que el público crea que ellos quieren transformar ese mundo y se les deje libres en sus papeles de héroes populares.

En un plano de esa estampa regional aparece Cuba, con la oscuridad añadida porque no hay prensa libre.

Ahora, por fidelidad a la costumbre, se canta y se celebra el papel mediador de la Iglesia para que el gobierno libere a algunos de los casi 200 presos políticos que hay en la isla.

Hasta el momento, han enviado a su casa a un solo hombre, Ariel Sigler Amaya, enfermo, parapléjico, destruido por siete años de prisión. Estados Unidos le ha dado una visa humanitaria. La familia hace una colecta para pagar el viaje y los gastos médicos en ese país.

La otra ventaja, cambiar de cárcel para acercar a sus lugares de origen a otros presos, ha tenido esta reacción del prisionero Juan Carlos Herrera: «Mi traslado es una burla. Me han enviado a un antro de terror».

Estos personajes son figurantes, sus experiencias no cuentan.

El protagónico es para monseñor Domenico Mamberti, enviado especial del Vaticano a Cuba. No ha visto a ningún preso, pero su presencia bendice el culebrón este verano.

Raúl Rivero

Foto: AFP. Ariel Sigler Amaya habla por teléfono frente a su casa, en Pedro Betancourt, Matanzas.

Sobre admin

Periodista oficial primero (1974-94) e independiente a partir de 1995. Desde noviembre de 2003 vive en Lucerna, Suiza. Todos los días, a primera hora, lee la prensa online. No se pierde los telediarios ni las grandes coberturas informativas por TVE, CNN International y BBC World. Se mantiene al tanto de la actualidad suiza a través de Swissinfo, el canal SF-1 y la Radio Svizzera, que trasmite en italiano las 24 horas. Le gusta escuchar música cubana, brasileña y americana. Lo último leído han sido los dos libros de Barack Obama. Email: taniaquintero3@hotmail.com

Comentar

Su dirección de correo electrónico no será publicada.Los campos necesarios están marcados *

*

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

x

Check Also

El nombre de un opositor cubano

El nombre de un opositor cubano

Las personas que ocupan los sitios trascendentes en las filas de la oposición pacífica en Cuba no son, de ninguna manera, como aquellos figurones oficiales que el gobierno promueve descaradamente con grandes campañas publicitarias.